Como se puede observar en la fotografía, la Puerta de San Andrés conserva restos románico-mudéjares. El mudéjar, influenciado por las culturas islámica y cristiana, se refleja en las decoraciones geométricas y las formas sencillas de la Puerta de San Andrés.
Está formada por dos torres: una de planta cuadrada, que queda unida a la muralla; y otra de planta poligonal con saeteras en cruz, que queda expuesta al exterior. Entre ambas existe un pasadizo coronado por un arco de medio punto con un escudo real incrustado. También hay un cuerpo alto con ventanas y almenas.
En la parte superior hay una cornisa de bolas y almenas piramidales. En la cara interior del arco existe todavía una pequeña capilla con la imagen de la Virgen del Socorro, motivo por el que la Puerta sea también conocida como Arco del Socorro. Desde allí es posible divisar uno de los laterales de la Catedral de Segovia y su torre.
Puerta de San Andrés en la actualidad
Hoy en día, la Puerta de San Andrés sigue siendo una estructura impresionante que atrae a visitantes que buscan explorar la rica historia y la arquitectura de Segovia. Además de su importancia histórica y arquitectónica, esta puerta es un recordatorio de la época en que la ciudad estaba rodeada por una muralla que la protegía de posibles invasiones, y es un enlace tangible con el pasado de Segovia.